Riesgos y Prevenciones de la Ciberconvivencia entre los Jóvenes en Tiempos de Confinamiento

En tiempos de confinamiento, el uso de las redes sociales se formaliza como la principal oportunidad de ocio, mientras que paralelamente las plataformas de aprendizaje en línea buscan protagonizar el nicho de la enseñanza desamparada por la modalidad presencial, ambas generando beneficios de sincronía, interacción, trazabilidad y simultaneidad, pero también prescribiendo riesgos para los usuarios. Como es sobradamente conocido, las redes sociales han sido asociadas a consecuencias negativas, entre ellas “depresión, síndrome de déficit atencional con hiperactividad, insomnio, disminución de horas total de sueño, disminución del rendimiento académico, repitencia y abandono escolar” (Arab, y Díaz, 2015, p.10), además de las mencionadas, se ha evidenciado igualmente “adicción, el acceso a contenidos inapropiados, el acoso o la pérdida de intimidad (Echeburúa, y De Corral, 2010, p. 92). En suma, los entornos multimediáticos no son del todo negativos, de hecho, Przybylski y Weinstein (2019) han demostrado que los videojuegos violentos no tienen correlación en la agresividad de los jóvenes, asimismo, se ha constatado que el uso de las redes sociales potencia la creatividad, habilidades artísticas, fomentan a su vez la comunicación efectiva y la utilización de servicios basados en locación (Singh, Amiri y Sabbarwal, 2017).